La Amenaza Silenciosa: La Ganadería y la Escasez de Agua
La crisis de la escasez de agua es uno de los desafíos más apremiantes que enfrentamos hoy en día. En palabras del ex Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon:
“Debemos reconsiderar nuestras prácticas agrícolas y la forma en que manejamos nuestros recursos hídricos, pues la agricultura y la ganadería utilizan el 70% del agua potable y provocan más del 80% de la deforestación.”
Este llamado a la acción resalta la responsabilidad de la ganadería en el consumo desmedido de agua, un recurso cada vez más escaso.
Actualmente, más de 1100 millones de personas carecen de acceso a agua potable, mientras que la industria ganadera desperdicia (y contamina) aproximadamente 3800 millones de toneladas de agua. Este uso excesivo contribuye al agotamiento de las fuentes subterráneas y a la desecación de los principales sistemas fluviales del mundo.
Para ilustrarlo, consideremos el consumo de agua requerido por diferentes alimentos: producir una porción de carne requiere 4664 litros de agua, y una de pollo, 1249 litros. En contraste, una dieta vegana compuesta por tofu, arroz y verduras utiliza solamente 371 litros de agua, una reducción del 90%.
Si esta tendencia continúa, podríamos enfrentarnos a un futuro sin suficiente agua para subsistir. Es imperativo que tomemos medidas inmediatas, no sólo reformando nuestras prácticas ganaderas y agrícolas, sino también adoptando patrones de consumo sostenibles. Soluciones como cambiar a dietas más eficaces en el consumo de agua podrían marcar una diferencia significativa.
En conclusión, adoptar una dieta a base de plantas orgánica se presenta como la solución más inmediata y sencilla para contrarrestar esta tendencia. No sólo es la opción más efectiva en cuanto al uso de recursos hídricos, sino que también aporta beneficios significativos para la salud. Bien balanceada, una dieta de este tipo proporciona toda la proteína y los nutrientes necesarios para una vida plena, al tiempo que reduce el riesgo de enfermedades comunes, incluyendo aquellas transmitidas por animales como pollos, vacas y cerdos.
